"Les pido que le den un tiempo de gracia, luego podrán ver lo que significa la paz", dijo Ramos-Horta durante la sesión de apertura de la XVI Cumbre Mundial de Premios Nobel de Paz, que se lleva a cabo en Bogotá desde este jueves y hasta el próximo domingo.
"Hablar de reconciliación después de tantos sufrimientos parece imposible, pero en los acuerdos ha prevalecido la buena fe y la voluntad", dijo Ramos-Horta, y agregó que si para la guerra se necesita coraje, "también se requiere coraje para hacer la paz".
En ese sentido, envió un saludo de felicitación a los líderes de las FARC "por enfrentar el proceso de paz con coraje", y señaló que esta es una "oportunidad única" para que la paz sea una realidad en Colombia.
Sin embargo, los críticos al proceso, entre quienes se encuentra el expresidente derechista Álvaro Uribe (2002-2010), señalan que el mismo genera impunidad, lo cual han denunciado ante la comunidad internacional.
El conflicto armado colombiano, que ha enfrentado a guerrillas, paramilitares, agentes del Estado y grupos narcotraficantes por más de medio siglo, es el más antiguo del continente y ha dejado unos ocho millones de víctimas, así como 300.000 muertos, 45.000 desaparecidos y 6,8 millones de desplazados, según reportes oficiales.
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La XVI Cumbre Mundial de Premios Nobel de Paz es la primera que se realiza en Latinoamérica y en esta ocasión reúne a 14 laureados y 16 organizaciones que han sido distinguidos con el galardón, entre ellos el expresidente de la Unión Soviética Mijaíl Gorbachov, quien no asistió al encuentro en Bogotá por problemas de salud.
