Santana y su mujer están acusados de recaudar dinero ilícito procedente de empresas involucradas en la trama de Petrobras para financiar las campañas electorales.
"El blanqueo encubrió la utilización de productos de corrupción para remunerar servicios electorales, afectando a la integridad del proceso político democrático", escribió el juez Moro en la sentencia condenatoria.
Moro también explica que tanto Santana como su esposa confesaron en el juicio los "artificios" para ocultar la procedencia del dinero, las maniobras en las transferencias bancarias, la utilización de una cuenta off-shore, la simulación de un contrato de prestación de servicios, etc.
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El juez decretó que se bloqueen 4,5 millones de dólares que la pareja posee en cuentas en el exterior y estimó en una indemnización de 30,4 millones de dólares lo necesario para la reparación de los daños causados por sus delitos.