El proyecto fue apoyado por 498 votos, mientras 114 parlamentarios votaron en contra.
Una enmienda a la totalidad del proyecto de ley, que hubiera acabado con el proyecto Brexit, fue rechazada por cien votos contra 336.
Este potencial obstáculo lo presentó el Partido Nacional de Escocia y fue secundado por los escaños liberal-demócratas, cerca de cincuenta 'rebeldes" laboristas y, entre otros diputados, el ex ministro conservador Kenneth Clarke.
El líder laborista Jeremy Corbyn había impuesto una triple disciplina en sus filas para asegurar la autoridad parlamentaria que May necesita antes de informar a sus colegas europeos de la intención de salir de la UE.
Asegurado este primer trámite en los Comunes, el proyecto de ley será revisado en comité los próximos 6 y 7 de febrero, con una segunda votación prevista al día siguiente.
Este es la fase de admisión de enmiendas entre el centenar de propuestas de cambios al texto legislativo que han presentados los partidos de la oposición y diputados a título personal.
Una vez obtenido el sello real, la primera ministra podrá notificar al resto de líderes comunitarios el propósito británico de abandonar la UE.
Se abrirá entonces un periodo de dos años de negociaciones sobre el 'divorcio' británico del bloque de Bruselas.