Esta es la opinión del experto sobre las declaraciones de la procuraduría de los Países Bajos, según las cuales los investigadores holandeses no han podido decodificar la información de los radares presentada por Moscú en el marco de la investigación del siniestro del avión malasio MH17, ocurrido en el espacio aéreo de la región de Donbás, en Ucrania.
"La parte holandesa, intencionalmente, aplaza la presentación de los resultados de la investigación por motivos políticos", señaló Antoshkin, que agregó que "para la investigación de una catástrofe como esta no se necesitan tres años".
El general recordó que Rusia entregó a los investigadores toda la información requerida por las pesquisas. Así, el "carácter ralentizado" del proceso demuestra el deseo de ocultar la causa real de la tragedia.
"Esto se hace para mantener el aislamiento de Rusia e introducir diversas sanciones", denuncia el exmilitar. "Yo, personalmente, formé parte de las investigaciones de muchas catástrofes y si se quiere alcanzar un resultado, se consigue. Además, tienen todo el material necesario: nuestros datos, las imágenes satelitales, etc.", concluyó.
El 17 de julio de 2014, un Boeing 777 de la compañía Malaysia Airlines que realizaba el vuelo MH17 entre Ámsterdam y Kuala Lumpur fue alcanzado por un misil Buk cuando sobrevolaba la provincia de Donetsk, en el este de Ucrania.
A bordo de la aeronave se encontraban 298 personas, en su mayoría holandeses; no hubo sobrevivientes.
Ambas partes implicadas en el conflicto en el este de Ucrania siguen acusándose mutuamente del derribo y afirman que no disponían de las capacidades necesarias para hacer caer el avión malasio.
El grupo de investigación conjunto integrado por expertos de Australia, Bélgica, Países Bajos, Malasia y Ucrania concluyó en su informe del 28 de septiembre que el Boeing 777 de Malaysia Airlines fue derribado en julio de 2014 por un sistema de misiles tierra-aire Buk, supuestamente transportado desde Rusia a un área bajo control de las milicias de Donbás y, poco después, mandado de vuelta a territorio ruso.
La Defensa rusa desmintió estas acusaciones y señaló que las fuentes del grupo de investigación no eran imparciales.