"He visto el texto, es un artículo y no la copia de la Constitución", dijo a Sputnik el portavoz de la ACN, Hisham Marwa.
A su vez, Yahya Aridi, asesor de la delegación opositora en las consultas, subrayó que la prioridad es el armisticio.
El asesor admitió que la oposición no tiene en este momento el propósito de estudiar a fondo el nuevo borrador.
"Creemos que el tema de la Constitución nos desvía de la tregua, el asunto principal para el que fueron convocadas las conversaciones de Astaná", apuntó Aridi.
El martes el jefe de la delegación rusa en los diálogos de paz de Astaná, Alexandr Lavréntiev, adelantó que entregó a los representantes de la oposición armada siria el borrador de la Carta Magna.
La delegación de la oposición, a su vez, expresó su intención de trabajar sobre la nueva Constitución.
En las consultas de Astaná participaron también diplomáticos de Rusia, Turquía, Irán, Kazajistán, EEUU y la ONU.
La declaración final del encuentro contempla la creación de un mecanismo para verificar el cumplimiento del alto el fuego en el terreno.
La cita de Astaná, junto con la tregua declarada a finales del año pasado, es parte de un paquete de iniciativas apoyadas por el Consejo de Seguridad de la ONU en su resolución 2336.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas, entre ellas Daesh (autoproclamado Estado Islámico) y el Frente al Nusra (actualmente Fatah al Sham), ambas proscritas en Rusia y otros países.
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Según datos de altos cargos de la ONU, entre 300.000 y 400.000 personas perdieron la vida en el conflicto.