Alush, uno de los dirigentes del grupo Yeish al Islam, encabezó la delegación de la oposición armada que participará en las negociaciones de Astaná el 23 de enero y en las de Ginebra del 8 de febrero.
"Si conseguimos lo apetecido en las negociaciones, el combate cesará, y si no, entonces los hombres que empuñaron las armas las seguirán usando hasta obtener la victoria", declaró.
También constató que el clima del proceso negociador ha mejorado en comparación con el comienzo de 2016, gracias a la participación de Rusia en mucho grado.
"Debemos aprovecharlo para materializar los intereses del pueblo sirio", subrayó.
Anteriormente, el presidente ruso Vladímir Putin, anunció haber coordinado con el mandatario turco, Recep Tayyip Erdogan, la idea de proponer a las partes sirias en conflicto la capital kazaja como plataforma complementaria a las negociaciones de Ginebra.
Las negociaciones entre los representantes de Damasco y la oposición siria deben servir de base para elaborar una hoja de ruta para resolver la crisis siria.
El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, y la Administración de Donald Trump, quien tomará posesión mañana viernes, están invitados a participar en las negociaciones de Astaná.