"No nos importa quién sea el presidente de EEUU, lo más importante es si la nueva Administración continúa la política hostil hacia Corea del Norte, que calificamos de anacrónica, o renuncia a ella", dijo el embajador.
"La presión militar y las sanciones económicas convirtieron a Corea del Norte en una potencia militar que puede golpear a Estados Unidos", advirtió.
El diplomático declaró que lo más importante para garantizar la seguridad en la península de Corea es "poner fin a los peligrosos simulacros militares con participación de las fuerzas nucleares que llevan a cabo EEUU y Corea del Sur".
"Fomentar nuestra fuerza nuclear es una política de Estado", enfatizó Kim.
"Obama fracasó con su política exterior, la nueva Administración repetirá su destino si opta por la misma política", afirmó.
Anteriormente, el portavoz del Departamento de Estado norteamericano, John Kirby, declaró que EEUU no excluye aprobar nuevas sanciones contra Pyongyang si continúa desarrollando su programa nuclear.