El emprendedor Art Bilger, de EEUU, trata los resultados de esta investigación de una manera muy seria. Según él, el paro puede afectar no solo a los así llamados trabajadores de cuello azul, sino también a los de cuello blanco.
Es evidente que la mecanización, desde hace mucho tiempo, ha acabado con muchos puestos de trabajo. Basta solo con recordar la creación del telar, que asestó un duro golpe a los obreros textiles de todo el mundo.
No obstante, la nueva tendencia defiere de las anteriores en algunos aspectos.
Para 2034, es decir en menos de dos décadas, los empleos de la clase media quedarán obsoletos. La revolución tecnológica que se cierne actualmente sobre la sociedad contemporánea amenaza con aniquilar a toda la clase media.
Los ordenadores no solo podrán ejercer las funciones que realizan los seres humanos de una manera más económica, sino que además serán mucho más eficaces.
Uno de los sistemas que podría utilizarse en la lucha contra esta catástrofe social es el pago de un salario universal para los empleados por parte de las autoridades.
Con estos recursos financieros, los trabajadores podrán sobrevivir ante la pérdida de empleo y serán capaces de empezar cursos de readaptación profesional. Los que no quieran cambiar de profesión podrán utilizar el dinero en otros fines como empezar un nuevo negocio o… dedicarse al arte.