"Rusia no vio el apoyo de la coalición internacional", dijo Shoigú en una reunión con los altos mandos del Ministerio de Defensa.
La campaña en el país árabe, indicó, "requirió un trabajo intenso de todas nuestras fuerzas, la movilización de toda nuestra capacidad y la concentración de un contingente militar serio".
El ministro recalcó que las tropas del país cumplieron su misión en Siria.
Las fuerzas rusas comenzaron el 6 de enero la retirada del territorio sirio después de que el Gobierno de Bashar Asad y la oposición, con mediación de Moscú y Ankara, pactaran un alto el fuego que entró en vigor el 30 de diciembre.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a facciones armadas de la oposición y organizaciones terroristas.
Según los datos de la ONU, las hostilidades causaron entre 300.000 y 400.000 muertos.