No obstante, el escenario político para el país presenta incertidumbres y falta de visibilidad, según apuntan los especialistas. Asimismo, añaden que la investidura de Trump, el 20 de enero, podría ser una buena ocasión para salir del mercado.
"No podemos dejar de pensar que los republicanos han creado unas perspectivas inciertas y volátiles para la economía y para el crecimiento corporativo", explican los analistas de Morgan Stanley citados por Bloomberg.
Según Morgan Stanley, el S&P 500 terminará el año 2017 en 2.300 puntos —tan solo un 2% más del nivel actual—. Esto se debe la vulnerabilidad del crecimiento de los beneficios empresariales, la desaceleración de la economía china y la incertidumbre política en Europa.
Además, otros bancos también se mantienen cautelosos. Así, los expertos de Jefferies Group LLC indicaron que sus pronósticos interiores —que reflejaban una subida continua durante todo 2017—, no son relevantes.
"Es difícil recordar la última vez que un cambio de Gobierno en Washington proporcionó un impacto tan fuerte y ambiguo sobre la economía de EEUU", destacan los analistas de Bank of America Corp.