Según el experto, el distanciamiento entre Washington y Kiev será inevitable después de la toma de posesión del presidente electo estadounidense.
A lo largo de su campaña electoral, Trump indicó estar dispuesto a mejorar las relaciones bilaterales con Rusia, lo que ha llevado muchos expertos a creer que las relaciones de EEUU con Ucrania comenzarán a "enfriarse" en breve.
"Creo que Ucrania debe prepararse para lo peor. Creo que Estados Unidos ya no apoyará a Kiev de manera tan activa. Washington y Kiev están destinados a alejarse gradualmente el uno del otro", consideró Mezhuev.
"No hay recompensa económica. No hay un beneficio político significativo. Ucrania no ha logrado convertirse en un ejemplo de reformas liberales y democráticas. Al final, desgarrar a Ucrania de Rusia terminó siendo una actividad absurda y estúpida", subrayó Mezhuev.
El experto concluyó que Trump es "muy seguro de sí mismo" y su estrategia con respecto a Ucrania difícilmente estará basada en emociones, sino en datos exactos, como en el mundo de los negocios.