"Es una decisión política del Frente Amplio (partido gobernante), es un hecho que va en consonancia con la intervención de Uruguay en el marco de las Naciones Unidas", dijo a esta agencia el senador opositor Javier García, integrante de la Comisión de Defensa Nacional.
En su opinión, la solidaridad con el pueblo haitiano no puede estar condicionada a decisiones de política interna del Gobierno.
El Senado aprobó el miércoles el proyecto de ley por el que se prorroga el plazo de permanencia de los efectivos de las Fuerzas Armadas en la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en la República de Haití, informó la Cámara en un comunicado.
El canciller Rodolfo Nin Novoa explicó el lunes en la Comisión de Defensa Nacional que la decisión de extender el plazo no tiene que ver con que Uruguay forme parte del Consejo de Seguridad de la ONU.
En ese sentido, el senador oficialista Rubén Martínez Huelmo señaló el miércoles a La Diaria que detrás de esa decisión también hay "un tema de costos", en referencia a que si Uruguay decide sacar a sus tropas de Haití antes de la fecha agendada por la ONU debe asumir los gastos del desmantelamiento y los traslados.
"Para un país como Uruguay, es importante", explicó Martínez Huelmo al periódico local.
Sin embargo, García consideró que "esa excusa tiene muy poca jerarquía, porque condicionar una decisión de política exterior a los costos del flete de traer unos camiones no va en línea con la rica historia en materia de política exterior que tiene Uruguay", añadió a esta agencia.
Otros sectores activistas sostienen que la presencia de los cascos azules en Haití es una "ocupación" y aseguran que esa "no es una razón para considerar si hay que irse o no".
"La política internacional no se rige por si sale 10 pesos más o 10 pesos menos traer a un contingente, se rige por principios, por razones de fondo", explicó a Sputnik Andrés Olivetti, militante por el retiro de las tropas uruguayas en el país caribeño.
Olivetti sostiene que es necesario considerar la opinión del pueblo haitiano.
"No se habla sobre lo que quieren los haitianos, que han expresado en muchas ocasiones su rechazo a la ocupación", añadió el activista, quien también indicó que la "ocupación" de los cascos azules "viola el principio de autodeterminación de los pueblos".
En su opinión, la prórroga tiene que ver con "una alineación de la política uruguaya con la política neocolonial norteamericana".
"Es una política que desgraciadamente tiene que ver con la presión militar, con todo un problema mercenario de visualizar la política internacional, cómo resolver los problemas militares uruguayos; tiene que ver con la política internacional de hacer buena letra con los centros de poder más que de atender la situación del pueblo haitiano", concluyó Olivetti.
A pesar de que Uruguay es un país de tan solo 3,2 millones de habitantes, es uno de los principales contribuyentes de tropas con cerca del 20 por ciento de sus fuerzas operativas destinadas a misiones de paz, que se concentran principalmente en la República Democrática del Congo y en Haití.
Aún se desconoce si esta será la última prórroga de extender la permanencia militar uruguaya en Haití, donde actualmente permanecen 249 soldados.