En la operación, que duró unas siete horas, participaron "170 efectivos policiales y 250 militares, quienes realizaron las investigaciones pertinentes y determinaron que varios de los contenedores eran utilizados para almacenar víveres, balanceado e hidrocarburos", indicó la cartera de Estado.
La intervención se realizó en los alrededores del Canal Internacional de Zarumilla, ubicado en el sector de Huaquillas-Aguas Verdes, localidades limítrofes de ambos países.
El objetivo era prevenir y combatir la delincuencia, "que emplea construcciones clandestinas situadas en una zona de seguridad fronteriza", añade el comunicado.
Además, con esta acción se dio cumplimiento al Marco del Protocolo de Río de Janeiro, suscrito en Brasilia en 1998 tras la firma de paz entre Ecuador y Perú, que contempla en su Acuerdo Base que "la zona de seguridad de frontera abarca 20 kilómetros, desde los límites fronterizos, hacia el interior del territorio nacional" y debe permanecer despejada.
Otra de las exigencias es que no deben existir edificaciones ubicadas al norte del canal, por lo que estas construcciones estaban incumpliendo el convenio binacional.
Los establecimientos allanados, explicó el Ministerio, se encontraban en total abandono, por lo que no fue necesario llevar a cabo la etapa de desalojo.