"Christine Lagarde desarrolla una exitosa labor en el FMI y el Gobierno confía en sus capacidades para cumplir con sus obligaciones", dijo Sapin citado por Reuters.
Lagarde fue acusada en agosto de 2014 de negligencia en la designación de un tribunal de arbitraje privado que concedió en 2006 una cuantiosa indemnización, de 400 millones de euros, al empresario Bernard Tapie, amigo personal del entonces presidente de Francia, Nicolas Sarkozy.
En 1993 Tapie vendió la empresa Adidas, de la cual era accionista mayoritario, pero más tarde demandó al banco Credit Lyonnais por su manejo de la venta, alegando que el mismo había menospreciado deliberadamente la empresa.
La jefa del FMI fue ministra de Finanzas durante el mandato de Sarkozy, a quien Tapie había apoyado en su campaña presidencial.