Así comentó la idea de la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, de formular una postura común entre Rusia y la UE, diferente a la política que se propone aplicar la nueva administración estadounidense.
"Rusia y la UE pueden cooperar para responder a los desafíos y resolver los problemas graves pero es poco probable que aceptemos la idea de que se pueda asociarse contra alguien", dijo añadiendo que no es una postura que corresponde a los intereses de Moscú y Bruselas.
"Rusia tradicionalmente aspira a buenas relaciones con la UE, que ahora no existen como tales", añadió.
Opinó que tanto Moscú como Bruselas y los países de la UE están interesados de reanimar el dialogo.
Según Peskov, muchos desafíos exigen la cooperación de Rusia y la UE, incluida la lucha común contra el terrorismo y el cambio climático.