"Vamos a colaborar donde podemos, pero estaremos dispuestos a contrarrestar si es necesario", declaró el militar.
Este tipo de declaraciones puede agravar las tensiones en las relaciones entre EEUU y China, en particular después de la conversación telefónica entre el presidente electo norteamericano Donald Trump con la presidenta de Taiwán —país autoproclamado que Pekín considera una de sus provincias—. Más tarde Pekín protestó por la llamada a Washington.
China y varios países vecinos, como Japón, Vietnam y Filipinas, tienen discrepancias sobre sus fronteras marítimas en el mar de China Meridional y en el mar de la China Oriental.
Pekín, por su parte, considera que Filipinas y Vietnam deliberadamente usan el apoyo de Estados Unidos para escalar las tensiones en la región así que en numerosas ocasiones llamó a Washington a abstenerse de injerencias en el litigio entre los países de la región.