Esa cantidad formaría parte del total de diez millones de reales (más de tres millones de dólares) que el propio Temer habría pedido a Melo Filho para financiar su campaña electoral en las elecciones de 2014.
Según la delación premiada del directivo de Odebrecht filtrada a la prensa en mayo de 2014 se reunió en el Palacio de Jarubu con Temer y con el ministro de la Casa Civil, Eliseu Padilha.
Los tres acordaron que la mejor manera de ingresar el dinero era entregárselo a Yunes, hombre de confianza del presidente.
Las declaraciones de los directivos de Odebrecht —la principal empresa implicada en la trama corrupta de Petrobras— son conocidas como la "delación del fin del mundo", porque se espera que acusen a decenas de políticos.
Por el momento las palabras de Melo Filho, que apuntó a 51 políticos de varios partidos, provocaron la primera dimisión en el Gobierno.