"Hay veces que las mujeres rechazamos tanto esos estereotipos [de belleza] que nos convertimos en algo que ni siquiera nos representa. No perder el 'glamour' es permitirse ser como quiera, sentirse linda. No caigo en eso de que tengo que rechazar el rosado porque está estereotipado. Si me gusta me gusta", remarcó.
La economista contó que durante la adolescencia empezó a vestirse de una forma más varonil, que no resaltara su físico, porque quería ser vista como alguien inteligente. "Después me di cuenta de que igualmente no me iban a ver en serio, que como mujer nunca iban a valorar mi inteligencia", dijo sin resentimiento, sino con muy buen humor. Ante tal conclusión, D'Alessandro empezó a relajarse más y asumirse más femenina.
La obra, recién lanzada este mes por la Editora Sudamericana en Argentina, está disponible en las librerías del país y en la versión E-book para el resto del mundo.