"A pesar de los esfuerzos en el ámbito de las reformas, Ucrania sigue siendo el país más corrupto de Europa", dice el documento, elaborado como anexo a un informe sobre el apoyo a Ucrania por parte de la UE.
Asimismo, se señala que "los ingresos de la Hacienda sufren efectos negativos de la economía sumergida".
Los auditores europeos analizaron la administración de finanzas estatales, la lucha contra la corrupción y el sector gasista entre el 2007 y el 2015.
En particular, evaluaron si la ayuda que otorgó la Comisión Europea ha sido eficaz para apoyar los reformas en Ucrania.