"México no costeará de ningún modo los planes fronterizos de Trump", dijo la secretaria de Relaciones Exteriores, añadiendo que "no existe ningún mecanismo que pudiera obligar a México a pagar por la construcción de un muro en la frontera del lado de EEUU".
La jefa de la diplomacia del gobierno de Enrique Peña Nieto enfatizó que "no hay absolutamente ninguna posibilidad, ni siquiera legal, de que México pudiera pagar".
"No vamos a renunciar en ningún momento a nuestra obligación y nuestra responsabilidad de defender a nuestros paisanos y de proteger sus derechos, y tampoco de promover los intereses de nuestro país", destacó Ruiz Massieu.
Como estrategia defensiva, la canciller planteó a los legisladores a trabajar con el sector empresarial, desde sus estados, que tiene vínculos con el país vecino, "para activar la red de aliados que tenemos y la nueva que tenemos que construir en EEUU para la protección y defensa de los mexicanos, pero también de nuestros intereses".