"Es necesario dejar la puerta abierta para la cooperación con Rusia allí donde coincidan nuestros intereses", señaló al recordar el aumento de la presencia militar de la OTAN en Europa para detener la supuesta "agresión rusa".
El jefe del Pentágono calificó de "equilibrado" este enfoque de las relaciones.
Subrayó que su país no busca ninguna guerra fría ni tampoco una caliente con Rusia y no quiere verle como a un enemigo, pero defenderá a sus aliados.
Al mismo tiempo, Carter arremetió contra Moscú por su actuación en Siria y Ucrania y volvió a acusarle de supuestos ataques informáticos.
En octubre el departamento de Seguridad y la inteligencia de EEUU afirmaron sin presentar pruebas que presuntamente el Gobierno ruso había ordenado atacar el sistema electoral del país de cara a los comicios presidenciales del 8 de noviembre.
Desde Moscú rechazaron las imputaciones al calificarlas de infundadas y desafiaron a las autoridades estadounidenses a presentar pruebas.