"Los llamados grupos de oposición moderada usan contra el Ejército sirio y los civiles armas químicas recibidas de los países que apoyan al terrorismo", dijo.
Haddad señaló que Damasco había pedido a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) enviar expertos para llevar a cabo "una investigación abierta y transparente de estos casos".
El 13 de noviembre se informó de casi 30 militares sirios asfixiados por un ataque con gas tóxico perpetrado por los radicales cerca del aeropuerto internacional de Alepo.
Antes, el 3 de noviembre los grupos terroristas emplearon gas tóxico durante una ofensiva en el suroeste de la ciudad.
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El 30 de octubre los radicales lanzaron otro ataque químico en el suroeste de Alepo que provocó la muerte de dos militares sirios e intoxicó a 37 civiles.