"Creo que los tribunales federales estarán de acuerdo que estos métodos son un crimen de guerra", dijo.
Según Kiriakou, lo más probable es que Trump se encuentre con obstáculos jurídicos en caso de promover la iniciativa de legalizar la tortura y los llamados métodos ampliados de interrogatorio respecto a los sospechosos detenidos en las campañas militares de EEUU contra el grupo terrorista Daesh, autodenominado Estado Islámico.
El exanalista de la CIA subrayó que en Estados Unidos existe una legislación y unas reglas que prohíben las torturas.
En diciembre de 2014, el Comité de Inteligencia del Senado de EEUU divulgó más de 500 páginas de las más de 6.000 que alberga el informe sobre torturas aplicadas por agentes de la CIA.
El documento revela abusos cometidos por la CIA durante la presidencia de George W. Bush (2001-2009) y que incluyeron torturas y desinformación a las autoridades y la opinión pública.
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Uno de los recursos más utilizados era el tormento por ahogamiento que consiste en inmovilizar al individuo boca arriba sobre una tabla e introducirle agua por la boca y la nariz para generarle la sensación de ahogamiento.