"En primer lugar, EEUU debe revisar a fondo sus enfoques, definir claramente cuáles son los problemas en Afganistán y ocuparse de resolverlos en lugar de hacer conjuros… La nueva Administración tendrá que asumir la pesada tarea de reconocer sus errores y hacer un intento por reconsiderar sus planteamientos en Afganistán", dijo Kabúlov en una entrevista con RIA Novosti.
"Su contingente militar, más grande o más pequeño, lleva 15 años en el país, pero el resultado de esa operación, en la que se han gastado centenares de miles de millones de dólares, es lamentable", afirmó Kabúlov.
Washington, a su juicio, simplemente no puede continuar esta línea.
"De seguir así las cosas, los estadounidenses serán botados un día (de Afganistán), como ocurrió en Vietnam en el pasado", advirtió el representante del Ministerio de Exteriores ruso.
"Tendrán que construir relaciones con los países de la región, que son los primeros interesados en la estabilización en Afganistán… o sea, relanzar las relaciones con nosotros. Sin pecar de modesto, diría que es imposible resolver el problema afgano sin Rusia", concluyó el diplomático.
El diplomático ruso señaló que EEUU "debe dejar de comportarse como si tuviesen resultados en Afganistán".
"Ellos piensan que pueden librarse del problema con todo tipo de conferencias de donaciones, como la reciente en Bruselas —que fue positiva, nosotros abogamos por este tipo de cooperación— pero no eso no será suficiente, es un problema que hay que resolver en todos los planos: el político, económico y técnico militar". añadió.
El diplomático subrayó, que Moscú no descarta que se establezcan contactos con representantes de la administración del actual presidente de EEUU, Barack Obama, antes de que deje el poder.
"Este tipo de contactos pueden ser casuales, además, el 4 de diciembre en la ciudad india de Armitsar se llevará a cabo la conferencia ministerial del proceso de Estambul; allí habrán estadounidenses y si ellos quieren, por favor, nunca hemos evadido los contactos", aseveró.
El objetivo de este formato internacional que reúne a los países vecinos de Afganistán (tanto a los países que comparten frontera como los jugadores regionales importantes) radica en la implicación de Afganistán en la vida económica de la región asiática.
"Mientras Obama sea presidente, todos esos funcionarios continúan en funciones, pero en cualquier caso, no puede ahora proponer o desarrollar algo sin tomar en cuenta la opinión del presidente electo y su equipo; no pienso que Afganistán sea el problema número uno de la nueva administración, pero es un problema de segundo orden y deberá atenderla", añadió.