"Como parte de su interés mínimo en asuntos exteriores, Trump no ve Oriente Próximo como una buena inversión y es razonable asumir que buscará reducir la implicación norteamericana en la región", señala el texto.
"A la vez, está su compromiso de mantener la lucha contra el [grupo yihadista] Daesh y el impulso creado en la batalla por las ciudades de Mosul, en Irak, y Al Raqa, en Siria", afirma el documento, escrito por el Centro para la Investigación Política del Ministerio de Exteriores.
Las declaraciones de Trump no apuntan necesariamente a una política coherente en esta cuestión.
Por un lado ha expresado apoyo a los asentamientos (israelíes en territorio palestino) y a trasladar la Embajada de EEUU a Jerusalén. Pero en otras declaraciones ha dicho que quiere mantenerse neutral y que las dos partes tendrían que llegar solas a un acuerdo.