Mientras en la playa de Venice los hippies proponen secuestrar a Trump por una hamburguesa y venden camisetas en los que el republicano aparece con el hocico de un cerdo, los partidarios del magnate celebran una manifestación en el Paseo de la Fama, justo enfrente del famoso Dolby Theatre donde se entregan los premios Óscar.
"Trump es competente para devolver a los estadounidenses sus empleos porque gracias a sus compañías ya ha generado tantos, tiene la experiencia y el talento necesarios", comenta a RIA Novosti uno de los manifestantes, Bill.
El taxista Guenadi, quien se mudó de Moscú a Los Ángeles en 1992, asegura que Clinton "es la muerte para los demócratas".
"Personalmente, yo estoy a favor de Trump; los estadounidenses quieren votar por Clinton solo porque ya han elegido a un presidente afroamericano y ahora hace falta elegir a una mujer, no importa cuál sea", dice.
Agrega que "solo los rusos" votan a favor de Trump.
"Pienso que California siempre vota por los demócratas, y en estas elecciones el Partido Demócrata tiene mucha suerte porque Trump no le gusta a nadie", opina otro residente local, Collin.
El angelino recuerda que Clinton tiene más de 30 años de experiencia política y "debe de haber hecho algo bueno durante este tiempo".
"En cuanto a su agresividad, creo que si fuera un hombre, esta cuestión no se plantearía y todos pensarían que es normal; pero el hecho de que es una mujer cambia todo (…) con su experiencia y nivel de calificación no cabe duda que es apta para este cargo", apunta.
"Simplemente le dijeron que se comportara de la manera más provocativa posible, que fuera excéntrico hasta el final, así que debe ganar Hillary", explica su teoría conspirativa.
Para el crítico de cine Conor, las presidenciales de 2016 revelan una "división increíble" de la sociedad estadounidense: entre los ricos y los pobres, los blancos y las minorías étnicas, los jóvenes y los viejos.
"Además, muestran una profunda frustración con el actual sistema bipartidista, lo que transforma las elecciones más bien en un deporte que en una polémica política racional", concluye.
