Entre otros asuntos, el mandatario ruso expuso su opinión sobre la situación de bloqueo de Crimea por parte de los saboteadores ucranianos quienes habían cortado la electricidad en la península en plena temporada de invierno de 2015.
El mandatario ruso destacó el coraje de los habitantes de Crimea y criticó bruscamente a los saboteadores.
"Para quienes lo hicieron, es tan estúpido. ¿Qué esperaban ellos? Simplemente no entiendo, ¿esperaban que todo el mundo se pusiera de rodillas pidiendo limosna? Es increíble. Son idiotas increíbles", calificó la situación Putin.
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Crimea se quedó totalmente sin electricidad en la madrugada del 22 de noviembre de 2015, después de que fueran destruidas las torres de alta tensión en el sur de Ucrania que suministraban electricidad a la península.
La situación de emergencia empujo a Rusia a acelerar las labores de construcción de una línea submarina de electricidad desde la central nuclear de Rostov del Don a la ciudad de Sebastopol.
En el tiempo record, Crimea fue integrada en el sistema energético de Rusia, y con la construcción de todas las cuatro líneas submarinas —junto con las centrales térmicas en servicio— la península se hizo independiente de los suministros ucranianos.
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Putin también tocó el tema de la construcción del puente de Crimea sobre el estrecho de Kerch, que va a conectar la región rusa de Krasnodar y la península. Putin dijo esperar puntualidad y cumplimiento de los plazos de esta ambiciosa construcción y destacó que los mismos peninsulares contribuyen mucho al éxito del proyecto.
"Un papel crucial desempeñaron la actitud enérgica de los propios habitantes de Crimea y de Sebastopol, su vigor y resolución", añadió el presidente ruso.