"A juzgar por la composición [del grupo], no tanto va a realizar ataques como a desempeñar obras defensivas, incluso en el mar. En primer lugar se trata de defensa contra armas aéreas, pero el grupo cuenta con capacidades antibuque", dijo el experto.
Hay suficiente capacidad de ataque en la base aérea de Hmeymim, donde está ubicada una flota aérea bastante numerosa. En este sentido, Rusia recientemente ha desplegado sus sistemas antiaéreos S-300 para aumentar la protección de sus cazas de un posible enfrentamiento aéreo. Además, el contingente ruso mantiene emplazados en Siria sus S-400 y numerosos cazas y bombarderos, después de que el presidente, Bashar Asad, solicitara el apoyo de Rusia en la lucha contra los terroristas en 2015.
Anteriormente, los medios informaron que el buque de misiles Mirazh se dirigía rumbo a la costa siria.