El poder del dólar estadounidense ha desempeñado el papel principal en el mercado global de divisas, en las economías de todos los países y sus sectores bancarios, en las operaciones de importación y exportación. No obstante, el dólar no es tan fuerte como puede parecer —en realidad, está perdiendo su poder e influencia en el comercio global—.
"La creciente debilidad del dólar se debe a la tendencia adoptada por muchos países de eliminarlo de los procesos comerciales a nivel internacional y la apuesta por las monedas nacionales", sostiene el experto.
Entre los días 1 y 22 de julio de 1944 se celebró una reunión de la Conferencia Monetaria y Financiera de la Naciones Unidas. Las resoluciones tomadas durante este encuentro se conocen como los acuerdos de Bretton Woods y hasta ahora, establecen las normas y reglas del comercio internacional entre los países industrializados después de la Segunda Guerra Mundial.
Así, se mantenía fijo el precio del dólar, el cual se convirtió en la moneda de referencia en el comercio mundial. Otros países establecieron el precio de sus monedas nacionales en relación al dólar estadounidense. Asimismo, los acuerdos de Bretton Woods presupusieron el derecho de cualquier país a devaluar y reevaluar sus monedas nacionales respecto al dólar en la tasa fija del 10%. En otros casos, la corrección de cambio monetario requeriría una autorización del FMI, organización financiera creada en la reunión.
No obstante, en la actualidad Irán, Turquía, Rusia, China, Brasil, la India y Pakistán han decidido abandonar el dólar y utilizar sus monedas nacionales en el comercio bilateral. Además, según profundiza Ata, otros países expresan su disposición de seguir sus pasos, lo que tendrá un impacto negativo en la moneda estadounidense y en la economía de EEUU de forma indirecta.
De esta manera, enfatiza el especialista, en caso de expansión de las monedas nacionales en las operaciones de importación y exportación, las reservas del dólar estadounidense almacenadas en los bancos centrales de los países de todo el mundo pronto volverán a EEUU, lo que producirá un colapso económico de gran envergadura.
"Hoy, la deuda nacional de EEUU ha alcanzado 18 billones de dólares. Cada día el país va perdiendo su poder político y económico", apunta.
"En otras palabras, el Imperio Estadounidense ha entrado en la fase de estancamiento. Y tal periodo de decadencia siempre está seguido por un periodo de colapso", concluye.