"La expansión crediticia conducirá inevitablemente a un final triste. Ya hemos vivido esta historia anteriormente", dijo el analista Tad Rivelle, de la compañía TCW Group, citado por la agencia Bloomberg.
Este endeudamiento se debe al crecimiento del apalancamiento en EEUU —el indicador económico que muestra la relación entre el crédito y el capital propio utilizados por las compañías en las operaciones financieras—.
Los últimos cinco años seguidos este índice económico ha marcado un nuevo récord, alcanzando el billón de dólares.
"Nuestro consejo sigue siendo el mismo que antes: evitar invertir en activos que quebrarán durante el futuro desapalancamiento y seguir apoyando aquellos que solo correrán el riesgo de ser dañados cuando llegue el diluvio", recalcó.
El desapalancamiento es una medida que empieza a aplicarse cuando las empresas endeudadas ya no pueden soportar el peso de las mismas, lo que implica un desendeudamiento rápido, pero en condiciones desfavorables.