La cifra representa un recorte del 25% respecto a los 98.400 millones de dólares previstos de inversión que se contemplaban en el plan anterior, divulgado el pasado mes de enero.
Los dirigentes de Petrobras esperan que así se genere una recaudación adicional de 158.000 millones de dólares que les permita realizar inversiones y reducir la deuda sin necesidad de hacer nuevas captaciones.
El documento también oficializa la salida de actividades de producción de biocombustibles, GLP o gas de cocina, fertilizantes y petroquímica.
"La cartera de inversiones del plan prioriza los proyectos de explotación y producción de petróleo en Brasil, con énfasis en las aguas profundas", asegura la compañía, remarcando que en las demás áreas de negocios las inversiones se destinan básicamente al mantenimiento de las operaciones.
A pesar del fuerte recorte en inversiones la compañía sigue con los mismos objetivos en cuanto a producción de barriles de petróleo.
En 2021 se espera estar produciendo 2,77 millones de barriles al día en Brasil, cuando en el plan anterior el objetivo era de 2,17 millones de barriles al día en el año 2020.