"Cabe recordarle al Gobierno que los recursos renovables y no renovables de los que pretende disponer para ceder alegremente a manos británicas, pertenecen a 40 millones de argentinos", reza el comunicado, firmado entre otros por el excanciller Jorge Taiana (2005-2010) y el premio nobel de la paz, Adolfo Pérez Esquivel.
El texto sostiene que el acuerdo "soslaya la controversia de soberanía" al acordar "remover" los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo de las islas Malvinas, entre los que se incluyen la pesca, la navegación y los hidrocarburos.
La semana pasada el Gobierno que preside Mauricio Macri acordó con Gran Bretaña la reanudación de los vuelos desde el continente a las islas y la explotación por parte de ambos países de la pesca y los hidrocarburos en la zona marítima.
El acuerdo no especifica ninguna cuestión referida a la soberanía del territorio, en disputa por parte de Argentina.
Causa regional
El texto considera "alarmante" que el acuerdo establezca una coordinación "más estrecha" entre ambos Estados en cuestiones de Defensa y Seguridad, punto que fue acordado "sin elevar reclamo alguno" sobre la base militar que el Reino Unido tiene instalada en las islas Malvinas, y que cuenta cerca de dos mil efectivos británicos.
"La defensa de nuestra soberanía en Malvinas no es una causa argentina, es una causa regional, una causa global, de todos quienes rechazamos la existencia de un cónclave colonial al sur de nuestro continente", afirma el comunicado.
Esta secretaría fue eliminada por el Gobierno de Mauricio Macri.
El comunicado asegura además que lo acordado entre Argentina y el Reino Unido no reportará beneficios económicos para el país sudamericano, "ni favorece un avance en materia de integración social con los isleños".
"Mientras un habitante de las islas puede circular libremente por nuestro país, estudiar gratuitamente en nuestras universidades y recibir asistencia en el sistema de salud pública, un ciudadano argentino no podrá establecerse en las islas Malvinas", afirma el escrito.
Por este motivo la canciller Susana Malcorra se comprometió el lunes a concurrir al Congreso a explicar los alcances del texto firmado con Reino Unido, que la diplomática calificó de "declaración".
Argentina reclama la soberanía del archipiélago desde 1833, año en que Reino Unido pasó a ocupar las islas.
Desde entonces ambos países mantienen un litigio por la soberanía del archipiélago, que llevó a que en abril de 1982 la dictadura argentina (1976-1983) intentara recuperarlas por medio de una guerra que culminó el 14 de junio con la derrota del país sudamericano y con casi 1.000 muertos entre ambos bandos.
Reino Unido y Argentina retomaron sus relaciones diplomáticas en febrero de 1990, durante la gestión del expresidente Carlos Menem (1989-1999).