El presidente del Instituto de Estudios sobre Oriente Próximo, Evgueni Satanovski, citado por la Agencia Rusa Federal de Noticias (FAN, por sus siglas en ruso), no comparte esta preocupación dado que, según su opinión, Israel no tiene una política especial con respecto a Siria.
"Actualmente, cuando un proyectil cae en territorio israelí desde territorio sirio, Israel, como respuesta, destruye en la línea fronteriza los puntos que le parecen convenientes. Lo demás no le interesa a Israel", explicó Evgueni Satanovski.
Teniendo en cuenta que la aviación de Rusia participa en la lucha contra el terrorismo en Siria, Satanovski comentó que la posibilidad de un encontronazo entre los militares rusos presentes en el país árabe y los soldados israelíes es mínima. Al mismo tiempo, los intereses políticos de Moscú y Jerusalén en la región no se contradicen, aseguró.
"La Federación de Rusia conserva actualmente relaciones igual de buenas con Irán, Israel, las repúblicas árabes, las monarquías árabes —desde Jordania y hasta los Emiratos— e, incluso, con Arabia Saudí", detalló.
"Israel va a actuar en Siria igual que lo hace y lo ha hecho, partiendo de sus ideas sobre la seguridad propia", subrayó Satanovski.
La mayor discordia entre Israel y Siria se debe a la disputa que mantienen por los Altos del Golán. Esta estratégica meseta, ubicada en la frontera entre Israel, Líbano, Jordania y Siria, pertenecía a Siria desde 1944, pero pasó parcialmente a manos israelís durante la guerra de 1967, también conocida como Guerra del Yom Kipur. En 1981, la Knéset —Parlamento de Israel— decidió unilateralmente declarar la soberanía del país hebreo sobre este territorio.
Los últimos intentos de negociación tuvieron lugar en 2008, con la mediación de Turquía, pero de nuevo fueron infructuosos. Entre otras cosas, en aquella ocasión Israel mostró su malestar por las relaciones cercanas de Bashar Asad con Teherán y con la organización islámica libanesa Hizbulá.