En 1991, el delincuente condenado escapó del Reclusorio Norte de la Ciudad de México, vestido de mujer; en 1998, se fugó del Reclusorio Oriente capitalino, escondido en un contenedor de basura; en 1999, se evadió del Reclusorio Sur de la urbe y este año había logrado escapar de nuevo del Reclusorio Oriente.
Sánchez, de 50 años, está sentenciado por secuestro, delincuencia organizada y robo agravado a 115 años de prisión.
La policía de la capital descubrió al fugitivo en un hotel en Tlalnepantla, fue perseguido y luego capturado cuando viajaba a bordo de un vehículo, en un enfrentamiento en el que los policías lo balearon en la pierna y le decomisaron un arma de fuego y una identificación falsa.
Las fugas del delincuente llevaron a la prensa local a recordar los escapes de Joaquín Guzmán, alias "El Chapo", jefe del narcotraficante cártel de Sinaloa, que se fugó en un carro de ropa sucia en 2001 y por un túnel perforado desde el exterior hasta su celda en el verano de 2015, hasta su recaptura en enero de 2016.