Agregó que "los ataques continúan día y noche".
En su opinión, el acuerdo ruso-estadounidense sobre Siria da la esperanza de que las formaciones militares controladas por EEUU se trasladen del este de Alepo, lo que permitiría reanudar la salida de los civiles a los territorios seguros.
"Nuestro objetivo es garantizar la seguridad de los civiles que abandonan los barrios orientales de Alepo, así como controlar la implementación del cese del fuego", enfatizó Kopitsin.
Entre los puntos clave del acuerdo figura una tregua que se declara a partir del 12 de septiembre durante 48 horas prorrogables por periodos similares con la expectativa de que se haga sostenible.
Siria vive desde 2011 un conflicto armado que se ha cobrado más de 250.000 vidas, según el último balance oficial de la ONU.
Las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y organizaciones terroristas, entre ellas Daesh (o Estado Islámico) y el Frente Fatah al Sham (antiguo Frente al Nusra), ambas proscritas en Rusia y otros países.