"La organización terrorista PKK ha intentado intensificar sus actividades en nuestras zonas fronterizas tras el 15 de julio; estos ataques que tienen un objetivo de socavar la operación de Turquía en Siria todavía continúan", dice un comunicado publicado en el sitio web presidencial.
Erdogan advirtió que el PKK no logrará éxito porque "el pueblo ya se pronuncia abiertamente contra esta organización".
Ademas, destaca que "el deber del Gobierno turco" es destruir el grupo terrorista Daesh (autoproclamado Estado Islámico) en Siria para que no amenace a Turquía.
Más tarde, Ankara dio a entender que la operación de limpieza antiterrorista continuaría "de norte a sur".
El Gobierno sirio protestó por la incursión de Turquía, alegando que viola la soberanía del país. También los kurdos sirios condenaron la operación turca al afirmar que apunta contra ellos más que contra los yihadistas de Daesh (proscrito en varios países incluida Rusia).
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