El analista señaló que los precios se alzarán a corto plazo y permanecerán entre 50 y 70 dólares.
"El precio de entre 50 y 70 dólares por barril hará que el mercado se vuelva estable y previsible y probablemente traerá beneficios a todos los actores, incluyendo a Rusia y Arabia Saudí que optan por un crecimiento moderado de la producción y un mayor beneficio por la extracción", agregó.
Rusia y Arabia Saudí acordaron este lunes llevar a cabo acciones conjuntas o en cooperación con otros productores de petróleo con el fin de alcanzar la estabilidad en el mercado del crudo y garantizar un nivel estable de inversiones a largo plazo.
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 2 de septiembre de 2016
La declaración correspondiente fue firmada por el ministro de Energía ruso Alexandr Nóvak y su homólogo saudí, Khalid Al Falih, en la cumbre del G20 en China.