La noche del 4 de septiembre, los organizadores del festival, dedicado a conmemorar el 350 aniversario de la catástrofe de Londres, prendieron fuego a una maqueta enorme de la capital británica, fiel reproducción de la urbe allá por el siglo XVII.
De acuerdo con la agencia RIA Nóvosti, la obra de madera fue creada por el artista estadounidense David Best e instalada en una plataforma flotante en medio del río Támesis.
Esta insólita acción se celebró a la vez que otros eventos planeados en el marco del festival.
En particular, el museo de Londres organizó la exposición '¡Fuego! ¡Fuego!', cuyo objetivo era recrear, a través de piezas arqueológicas, la atmósfera de Londres antes, durante y después de la catástrofe.
El Gran Incendio de Londres se produjo en domingo, el 2 de septiembre de 1666, en una panadería, y continúo hasta el 5 de septiembre. Las voraces llamas convirtieron en cenizas al menos 13.500 de casas.
Los ecos de la catástrofe siguen presentes en la literatura y la pintura de los años posteriores al incendio.