Meyer declaró que las actuales autoridades del país tratan de unir y estabilizar a Siria, no obstante, el país corre el riesgo de "convertirse en un Estado en bancarrota sin ninguna perspectiva de paz" en caso de la victoria de la oposición.
De acuerdo con el analista, a pesar de que es posible una tregua en el país, Moscú y Washington tienen "diferentes definiciones" del alto el fuego. Por ejemplo, Rusia quiere luchar contra "todos los que están en contra del régimen de Asad", opinó Meyer.
El último alto el fuego en el país se utilizó para suministrar armas al Frente Fatah al Sham a través del territorio de Turquía. Según Meyer, esta organización terrorista está relacionada con todos los grupos de la 'oposición moderada' apoyados por Washington.