"Debido a la situación vinculada a daños en viviendas y el sector de comunales, se tomó la decisión de implementar el régimen de situación de emergencia en Grozni; fue creado un estado mayor operativo para dar solución a los daños causados por el mal tiempo", señaló el alcalde.
La alcaldía informó de más de un centenar de árboles derribados por los fuertes vientos.
Además, las rachas arrancaron los techos de varias escuelas, varias decenas de viviendas sufrieron daños, además del tendido eléctrico, hecho que provocó que parte de la capital chechena quedase sin fluido eléctrico.
El alcalde señaló que debido al alto nivel de las precipitaciones se inundaron algunas partes de la ciudad.
El 28 de agosto fue anunciado en Grozni un domingo rojo con el objetivo de limpiar las calles y las plazas.
La situación está siendo controlada personalmente por el jefe en funciones del gobierno de Chechenia, Ramzán Kadírov.