Según el medio, fueron trasladados al hospital como medida de precaución, porque posiblemente estuvieron en contacto con derivados de hidrazina, un químico altamente tóxico.
La fuga ocurrió cuando un equipo de militares trabajaban con la fuente de alimentación del caza.
El incidente tuvo lugar en el ala 177 de la aviación de la Guardia Nacional de EEUU en Egg Harbor, estado de New Jersey.
El contacto directo con hidrazina puede provocar irritación en los ojos, nariz y garganta, mareos, dolor de cabeza, náuseas, convulsiones y coma, mientras la exposición aguda puede dañar el hígado, riñones y el sistema nervioso central.