Pagar por una reunión
Para concertar una cita con Clinton mientras ocupaba su puesto en el Departamento de Estado, los políticos, empresarios y otras figuras públicas se vieron obligados a realizar una donación a su fundación. Además, Abedin y Doug Band, funcionario de la Fundación Clinton, eran las personas a los que los donantes tenían que dirigirse para solicitar reuniones con la entonces secretaria de Estado.
A juicio del experto en relaciones internacionales Yuri Pochta "otros políticos estadounidenses se comportan de la misma manera, lo que evidencia el hecho de que los organismos gubernamentales en EEUU son corruptos".
Pagar por los servicios prestados
Según el presidente de Judicial Watch, Tom Fitton, "Hillary Clinton abusó de su cargo, por lo que es necesario que se inicie una investigación independiente para determinar si Clinton y sus colaboradores habrían violado la ley".
"En su mayoría, los estadounidenses no entienden de política, por lo que van a creer en lo que digan los demócratas, los cuales, por supuesto, tratarán de justificarse a sí mismos", ha comentado Pochta, además de añadir que "los materiales divulgados no harán daño a la campaña de Clinton y hasta podrían hacerla más popular".
Lucha contra los oponentes políticos
Con anterioridad, los líderes del Partido Demócrata también se vieron salpicados por un escándalo relacionado con la manipulación de los principales medios de EEUU, después de que el portal WikiLeaks hiciera públicos una serie de correos y documentos del Comité Nacional Demócrata (CND).
Hillary Clinton ha afirmado en más de una ocasión que las 55.000 páginas de documentos que entregó al Departamento de Estado contienen todos sus correos relacionados con su servicio como secretaria de Estado. Sin embargo, los nuevos documentos revelados contradicen estas declaraciones hechas a lo largo de la campaña, según las cuales "todos los correos relacionados con el trabajo" fueron entregados a las autoridades.