La primera parte de esta última etapa consiste en la declaración de los testigos escogidos por los autores de la denuncia, los juristas Miguel Reale Junior, Janaína Paschoal y Hélio Bicudo, así como por la defensa de Rousseff, que lidera el ex ministro de Justicia José Eduardo Cardozo.
Serán ocho testimonios que de una manera tienen relación con las llamadas "pedaladas fiscales", el supuesto delito que habría cometido Rousseff y que es la base de todo el proceso; un supuesto maquillaje de la contabilidad pública para esconder números rojos.
El Tribunal Supremo Federal, que capitanea esta última parte del "impeachment" considera que la parte en que los senadores escucharán a los testigos de un lado y del otro empezará el jueves y terminará el viernes, aunque es posible que las declaraciones se alarguen durante el fin de semana.
Sin embargo, por el momento no se ha confirmado si Rousseff estará dispuesta a contestar las preguntas de los senadores o si sencillamente leerá un texto en el que explicará por qué considera que no cometió ningún delito de responsabilidad.
En ese caso el actual presidente interino, Michel Temer (PMDB), asumiría la presidencia con todas las garantías.
Si por el contrario Rousseff consigue convencer a los senadores —lo que a día de hoy según todos los analistas es poco probable— reasumiría la presidencia de la República inmediatamente.