Ante todo, el autor del artículo se basa en el sistema de búsqueda y seguimiento por infrarrojos (IRST, por sus siglas en inglés) del Su-35, que le permite determinar la ubicación de otros aviones en un radio de 50 kilómetros —el radio potencial de descubrimiento de aviones invisibles—. El F-15 simplemente no tiene un sistema de esa clase.
Por otro lado, el F-15 cuenta con un radar activo APG-63 V3, que supera por poco al radar pasivo de barrido electrónico Irbis-E del Su-35. Sin embargo, el sistema de radar del avión ruso tiene un alcance de 400 kilómetros, lo que pone a los dos aviones, prácticamente, en igualdad de condiciones.
Otra de las características que dan ventaja al Su-35 es la capacidad de cargar más armas, lo que lo hace más efectivo en combate cercano. Entre otros, el Su-35 cuenta con 12 bloques colgantes para el transporte de misiles, frente a los ocho del F-15.
En total, el Su-35 puede llevar hasta 7,7 toneladas de municiones, seis de las cuales pueden ser usadas para realizar ataques contra objetivos en tierra; el F-15, por su parte, fue creado exclusivamente para trabajar en el aire, por eso no cuenta con misiles aire-tierra.
De la misma forma, el Su-35 está equipado con un sistema de interferencia de radiolocalización L175M Khibiny.
"De este modo, el Su-35 recibe el premio al mejor caza, y continúa siendo una plataforma misil muy efectiva y universal contra objetivos terrestres y aéreos", concluye el autor.