"El 2 de agosto (…) en el este de Alepo desde el distrito Suqari controlado por el grupo Nureddin al Zinki, considerado oposición moderada por EEUU, fueron lanzadas armas químicas contra un barrio residencial", dijo.
Según Chvarkov, el ataque se saldó con siete muertos y 23 hospitalizados por intoxicación.
El 28 de julio, Rusia y Siria lanzaron una amplia operación humanitaria en Alepo, la segunda en importancia ciudad del país árabe y escenario de intensos enfrentamientos en los últimos meses.
Se abrieron varios corredores para que civiles y rebeldes sin armas puedan abandonar la ciudad y otro, para la salida de insurgentes armados.
A mediados de julio fue publicado en internet un vídeo que mostraba la decapitación de un niño por radicales del Nureddin al Zinki. El menor vivía en un campamento palestino situado en las proximidades de Alepo y fue acusado por los terroristas de mantener vínculos con el Gobierno sirio.