El dron —un robot autónomo— está equipado con unidades de procesamiento complementarias y programado para buscar las estaciones necesarias y realizar por su cuenta el cambio de baterías. Al entender que su carga se está agotando, busca la estación más cercana con ayuda de un sistema de GPS, cámara y señales de radio.
Por su parte, la estación puede cargar las baterías usadas en tres horas y puede garantizar el trabajo autónomo de tres o cuatro drones. Por ahora, las estaciones creadas por los ingenieros funcionan únicamente con drones especiales, pero se espera que, en el futuro, cualquier dron pueda acceder a ellas.
El objetivo del proyecto es solucionar el problema de trabajo ininterrumpido de los multicópteros, gracias al cambio automático de batería. "El mayor problema de los drones modernos es que pueden trabajar poco tiempo con una sola carga. Actualmente, es necesario aterrizar el multicóptero y recargarlo cada 30 o 40 minutos", explica el experto.
En este momento, el costo de una estación es de 2,5 millones de rublos —38.000 dólares, aproximadamente—, mientras que un multicóptero cuesta 150.000 rublos —alrededor de 2.300 dólares—.
Según los creadores, para cubrir una distancia de 100 kilómetros se necesitan cerca de 10 estaciones especiales, puesto que, por ahora, la distancia que puede cubrir un dron sin descargarse es de cerca de 10 km.
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Los desarrolladores esperan que su tecnología sea usada por empresas de transporte y de carga, así como por equipos que realizan investigaciones geográficas y grabaciones aéreas, y también por compañías de monitoreo con ayuda de drones.