"Estas instalaciones contienen gas a alta presión, así como hidrocarburos que implican un alto riesgo, en la medida que la comunidad impidió hacer un cierre técnico de la planta, por ello, un incidente desastroso podría ocurrir en cualquier momento, con graves consecuencias en las personas, el medio ambiente y las instalaciones", señaló el funcionario en una carta pública dirigida a Vladimir Moreno, vocero de los indígenas.
"La planta de gas Gibraltar es una instalación industrial clasificada como Clase NEC I, División I, Grupo D. Por lo anterior, el no cumplimiento de las normas de seguridad (…) acarrea riesgos en especial a las personas de una afectación por quemaduras, explosión o muerte", explicó el directivo en la misiva.
Durante la madrugada del pasado miércoles, cerca de 90 indígenas U'wa tomaron la planta y obligaron a los trabajadores a apagar el generador que surte de electricidad al sistema —según denunció la petrolera—, en el marco de una protesta que mantienen desde el 30 de mayo.
Las instalaciones surten a diario 39 millones de metros cúbicos de gas para cerca de 300.000 usuarios en once municipios de los departamentos de Santander, Norte de Santander (nordeste) y Antioquia (noroeste).
Asimismo, reclaman por el incumplimiento del Gobierno a un acuerdo firmado en mayo del 2014, en el cual se convino el reconocimiento a los títulos coloniales, el saneamiento de las áreas del resguardo y un resarcimiento histórico por dos billones de pesos (unos 666 millones de dólares), entre otros.