"España utiliza una política neofranquista en relación con las aguas de Gibraltar, niega el respeto a la jurisdicción de Gibraltar y la soberanía del Reino Unido sobre las aguas adyacentes al Peñón. Esta posición de negar aguas a Gibraltar impide cualquier acuerdo de cooperación", explicó Jesús Verdú, profesor de Derecho Internacional de la Universidad de Cádiz.
Verdú justificó esa afirmación asegurado que "una consecuencia de arrastrar todavía sesgos franquistas en política exterior es la negación a coordinar todas las actividades relacionadas con los espacios marítimos".
"La descoordinación entre el control de tráfico marítimo va a tener como consecuencia que el riesgo de accidente esté constantemente presente", aseguró el profesor.
En esa dirección, Verdú apuntó de manera inequívoca al Gobierno del Partido Popular (PP) como responsable de la situación de descontrol en aguas gibraltareñas.
"Desde que el Gobierno del PP accedió al poder se ha producido un incremento muy importante de buques en aguas bajo el control de Gibraltar sin justificación. Esto ha multiplicado los incidentes", analizó el profesor.
Estas incursiones, según Jesús Verdú, son interpretadas por algunos expertos como un acto de provocación ante las autoridades extranjeras que coloca a las embarcaciones en una situación de riesgo sin ninguna justificación.
En las aguas en disputa en torno a Gibraltar antes se admitía el control de las autoridades gibraltareñas y británicas, sin embargo, según explicó este profesor de Derecho Internacional, las incursiones bajo el Gobierno del PP han roto ese statu quo.
"Cuando se envía una patrulla de la Guardia Civil y se busca un enfrentamiento con las patrulleras de Gibraltar, lo que el Gobierno Español no tiene muy claro son los riesgos que derivan de la actuación, que a veces rozan la irresponsabilidad ya que puede haber un choque", zanjó Verdú.