Turquía se está recuperando de un fallido golpe militar que se saldó con 232 muertos y más de 1.500 heridos, según los últimos datos oficiales.
Cerca de 8.000 policías suspendidos en #Turquia https://t.co/unKeNw55dU
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 18 июля 2016 г.
Después de sofocar la rebelión, las autoridades empezaron una amplia campaña de purgas en las FFAA, cuerpos de seguridad y organismos del poder judicial para identificar a los representantes del 'Estado paralelo', partidarios del exiliado clérigo islamista Fethullah Gulen, a quien Ankara identifica como promotor de la intentona y cuya extradición exige a EEUU.