Un diplomático de Seúl citado por la agencia de noticias oficial Yonhap ha confirmado que el comunicado conjunto contra Pyongyang elaborado en la cumbre euroasiática de Ulan Bator contó con la colaboración activa de la cincuentena de países, incluidos China y Rusia.
"Esto muestra que nada ha cambiado en la actitud firme de China y Rusia de no tolerar el programa nuclear norcoreano y de implementar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU hasta el final", ha asegurado la fuente.
"Forma parte de los intereses chinos y rusos detener el desarrollo nuclear norcoreano", ha finalizado.
Pekín y Moscú son lo más parecido que tiene Pyongyang a amigos en la comunidad internacional y en el pasado han aguado las resoluciones en el Consejo de Seguridad de la ONU, pero los últimos desmanes norcoreanos también han acabado con su paciencia.
Más: Rusia y China rechazan las ambiciones nucleares de Corea del Norte
La región se ha visto sacudida en las últimas semanas por un par de acontecimientos que han elevado la tensión y fortalecido aparentemente el mapa de alianzas.
Por el otro, varios países de la zona y Estados Unidos han urgido a Pekín a cumplir el laudo arbitral internacional que ha fallado contra sus intereses territoriales y la han acusado de violar la soberanía filipina.
Ambos temas están siendo tratados con una gran beligerancia por la prensa oficial china, portavoz oficiosa del Gobierno de Pekín.
Lea más: Rusia y China darán respuesta al despliegue de antimisiles en Corea del Sur
Pero ninguno de los asuntos ha resquebrajado la firmeza internacional contra el programa nuclear norcoreano, señala Seúl, que espera que el reciente comunicado de la cumbre euroasiática haya enviado un claro mensaje a Pyongyang de que el mundo sigue unido contra sus ambiciones armamentistas.